martes, 28 de septiembre de 2010

Si el cielo está gris


La soledad no está tan sola...
¡No ves que a mí no me abandona!
Como una tempestad que va arrancando los tejados;
no sé quien me quitó lo que jamás me había dado.
Me asomo a la ventana siempre está lloviendo
y en mi vieja radio suena "Sol de invierno".
Perdido en el camino entre el amor y el odio;
tan cerca del cielo como del demonio...

¿Qué ha pasado que no quiere salir?
- Un rayito de sol que me ayude a vivir.
¿Qué ha pasado? ¿Se ha olvidado de mí?
- Y yo me siento triste si el cielo está gris.

Dame licor de ala de gaviota:
quiero volar, mojarme con las olas.
Dame licor de oreja de conejo
que quiero oír tu voz aunque estés lejos.

Venga, Manolillo, déjame el sombrero;
el del ala ancha que llega hasta el cielo.
Ponlo boca arriba, llénalo de versos;
déjalos volar, ¡que los reparta el viento!.

¿Qué ha pasado que no quiere salir?
- Un rayito de sol que me ayude a vivir.
¿Qué ha pasado? ¿Se ha olvidado de mí?
- Y yo me siento triste si el cielo está gris.

Manuel Chinato

Si El Cielo Está Gris

4 comentarios:

  1. No, no está sola... está conmigo también.

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  2. Ya te he leido que te sientes sola. Bienvenida al club

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  3. Dime por favor donde no estás
    en qué lugar puedo no ser tu ausencia
    dónde puedo vivir sin recordarte,
    y dónde recordar, sin que me duela.

    Dime por favor en que vacío,
    no está tu sombra llenando los centros;
    dónde mi soledad es ella misma,
    y no el sentir que tú te encuentras lejos.

    Dime por favor por qué camino,
    podré yo caminar, sin ser tu huella;
    dónde podré correr no por buscarte,
    y dónde descanzar de mi tristeza.

    Dime por favor cuál es la noche,
    que no tiene el color de tu mirada;
    cuál es el sol, que tiene luz tan solo,
    y no la sensación de que me llamas.

    Dime por favor donde hay un mar,
    que no susurre a mis oídos tus palabras.

    Dime por favor en qué rincón,
    nadie podrá ver mi tristeza;
    dime cuál es el hueco de mi almohada,
    que no tiene apoyada tu cabeza.

    Dime por favor cuál es la noche,
    en que vendrás, para velar tu sueño;
    que no puedo vivir, porque te extraño;
    y que no puedo morir, porque te quiero

    Jorge Luis Borges

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  4. Me ha gustado mucho el que has puesto, Marya Jose, precioso.

    Y del tuyo, Polonius, sin duda me quedo con la primera frase, magnífica, completa, perfecta, cercana y sentida: La soledad no está tan sola...
    ¡No ves que a mí no me abandona!

    Besos.

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